María Elena Ramos, directora del programa «Compañeros» para ayuda a personas con problemas de adicciones, dio a conocer que cerca de 30 personas viven en panteones de esta ciudad debido a que no cuentan con hogar y por la facilidad que existe en dichos sitios para consumir drogas.
Entrevistada al final de un evento en el campo algodonero, ubicado en la calle Paseo de la victoria, Ramos dio a conocer el caso de una joven que fue asesinada y calcinada la mañana del pasado viernes al interior del panteón Zaragoza, mujer que al parecer era usuaria de los servicios de «Compañeros».
Ramos indicó que están verificando los datos de identidad de la mujer para saber si se trataba de una de sus usuarias, destacando la saña con la que la mujer fue asesinada y calcinada.
La directora de dicha asociación señaló que ellos en sus recorridos han detectado a cerca de 30 personas, entre hombres y mujeres, que viven en panteones de la ciudad, municipal y Tepeyac, denunciando que dichas personas son invisibles y no existen para la sociedad.
Ramos destacó que estas personas viven ahí porque es más fácil consumir droga en dicho lugar, o simplemente porque no tienen hogar, sin embargo, resaltó el peligro al que están expuestos al vivir en ese tipo de instalaciones.
«Vamos a ir también a llevar apoyos al panteón Zaragoza, luego de lo que le pasó a esta mujer el pasado viernes, queremos pensar que también hay personas ahí viviendo», dijo la directora de «Compañeros».
Como grupo interinstitucional de ayuda, “Compañeros» lleva jeringas nuevas a diferentes puntos de consumo de droga en la ciudad, esto con la finalidad de evitar enfermedades que pueden transmitirse por utilizar jeringas usadas, apoyando de esta manera a los consumidores para que no vayan a ser contagiados con algún tipo de enfermedad viral.
Destacó que, en el caso de los adictos, ellos son la última parte de una cadena en la que solo unos pocos son los que se convierten en millonarios y los adictos únicamente se dedican a sobrevivir.
